La Armada reconoce que España ha renunciado a misiones internacionales por el retraso de los submarinos S-80.

El AJEMA ha mostrado su intención de realizar la quinta gran carena a los submarinos Mistral y Galerna, tras el Tramontana, que ya está en la parte final del proceso. En total, la inversión supondría unos 130 millones de euros, y permitiría seguir contando con estas capacidades submarinas hasta que lleguen los nuevos S80. Las capacidades submarinas que España aporta a misiones internacionales de la OTAN u otros organismos han descendido en los últimos años. 

El motivo es el retraso de los submarinos S80, que ha dejado a la Armada con uno solo de estos buques operativos. En palabras del Almirante Jefe del Estado Mayor de la Armada -AJEMA-, Jaime Muñoz-Delgado, "lo mínimo que se precisaría para poder ofrecer algo son 3 submarinos". Precisamente, son 3 de los que dispone la Armada, pero a falta de desmontarlos y revisarlos a fondo para actualizarlos y garantizar su operatividad, lo que se conoce como gran carena. Una gran carena a la que ya se ha sometido el Tramontana, que está a punto de volver a estar operativo, tras 18 meses en los astilleros y que ha supuesto una inversión que ronda los 43 millones de euros. Una operación que la Armada quiere repetir con el Mistral y el Galerna. Sería la quinta de cada uno, cuando suelen realizarse cuatro. Una situación a la que se ven obligados por el retraso de los S80 y que costaría, en total, unos 130 millones de euros. Por eso, el AJEMA ha explicado que antes de tomar esta decisión “habrá que analizar los costes, que a veces nos echan para atrás”.

No obstante, el almirante general Muñoz-Delgado ha destacado que el retraso en los nuevo S80, que se esperaba que estuvieran operativos en 2011, “no debería sorprendernos”, al tratarse de “un reto tecnológico de enorme magnitud”. De hecho, entre los almirantes de la Armada la opinión general es que “se ha subestimado” su diseño y construcción desde 0. Lo importante, recalcan, es que supondrá un salto tecnológico y estratégico para España, al contar con los últimos medios. En este momento, los nuevos S-80 que conformarán el arma submarina de la Armada de las próximas décadas –una capacidad estratégica, en palabras del almirante Muñoz-Delgado- se encuentra en fase de rediseño. Este proceso finalizará en verano y, a partir de ese momento, podrán empezar a construirse. Lo que ya está construido, aunque no se ha montado a falta de integrar los sistemas que se fabriquen, es el casco, en secciones, del primer submarino, el S81Plus -debido al incremento de tamaño que ha experimentado por el cambio de diseño-.

Pese a este nuevo rediseño, el AJEMA ha destacado que no hará falta incorporarle nuevas capacidades -a pesar de que se esperaba comenzar a utilizarlo en 2012-, porque “su tecnología estaba sobredimensionada”. Lo que no ha confirmado es la nueva fecha de recepción: “No me gusta dar fechas, porque si digo un año, y no sale para ese año, saldrá para el siguiente”. Según expertos consultados por One Magazine, si no surgen nuevos retrasos, la primera unidad debería estar navegando, como tarde, para 2019. Lo que sí ha defendido es la apuesta de la Armada por la industria naval española. “Podríamos haber comprado un submarino fuera, pero los beneficios para la industria habrían sido mínimos y, además, no habríamos aprendido a hacerlo”, ha defendido. A principios de año, One Magazine ya publicó que, a mediados de 2016, se llevaría a cabo la Revisión Crítica de Diseño (CDR) del Programa de construcción del Submarino S-80. 

"Este hito tan importante marcará la finalización el Diseño Detalle confirmando la superación de los problemas técnicos y marcando definitivamente la viabilidad del proyecto tras el rediseño efectuado por NAVANTIA con el apoyo de la US Navy y de los astilleros de General Dynamics Electric Boat", explicaron fuentes de la Armada a One. Además, también destacaron que "la Armada tiene la intención de alargar la vida operativa de los submarinos Clase Agosta (S-70) mediante la realización de una 5ª Gran Carena –revisión exhaustiva que conlleva su desmontaje y montaje-. La decisión sobre ese alargamiento pasa por la emisión de los pertinentes informes favorables, desde el punto de vista técnico y de la Seguridad, por parte los astilleros franceses DCNS, diseñadores de estos submarinos; y será tomada previsiblemente antes del verano para comenzar con el Submarino Galerna (S-71)". (Jesús.R.G.)

Fuente: http://www.onemagazine.es/

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