Los futuros vehículos de combate del Ejército de EE.UU. Toman forma en nuevas imágenes conceptuales.

El Ejército de los EE. UU. Está desarrollando una nueva familia de vehículos de combate que cubrirá un espectro de autonomía y robótica para prepararse para el futuro campo de batalla. Estos vehículos, que abarcan una familia de nuevas plataformas tripuladas y no tripuladas, contarán con capacidades avanzadas para garantizar una continua coincidencia contra los adversarios durante décadas y más. El Comando de Desarrollo de Capacidades de Combate del Ejército de los Estados Unidos ha publicado nuevas imágenes que muestran el concepto de futuros vehículos de combate. La nueva familia de vehículos de combate se mantendrá con la unión de la inestabilidad y la tecnología disruptiva que erosionará la ventaja comparativa del Ejército después de la Guerra Fría. 

Las plataformas futuras tendrán capacidades similares a las de Terminator, que están habilitadas por una posición segura, navegación y sincronización y redes resistentes que permitirán que las futuras formaciones de maniobras ejecuten operaciones semi-independientes mientras realizan maniobras de dominio cruzado contra un adversario. Operando dentro del concepto de Vehículo de combate de próxima generación (NGCV), el Ejército trabaja para aumentar la capacidad de supervivencia y la letalidad de la plataforma de combate. En futuras formaciones de combate cuerpo a cuerpo, las unidades equipadas con NGCV deben maniobrar eficazmente en terreno urbano sin restricciones, restringido y denso. Los vehículos tripulados y robóticos estarán diseñados para maniobrar a los soldados en el futuro entorno operativo a una posición ventajosa para participar en el combate cuerpo a cuerpo y entregar una letalidad decisiva durante la ejecución de la maniobra de armas combinadas. NGCV debe exceder las capacidades actuales al mismo tiempo que supera los sistemas de clase de amenaza similares. 

Se espera que la nueva tecnología robótica ayude a los soldados de dos maneras: elimina la necesidad de que los soldados realicen tareas mundanas, peligrosas o repetitivas que pueden automatizarse, y aumenta la distancia de separación entre los soldados y una amenaza, lo que puede mejorar en gran medida la seguridad. Además, la automatización puede aumentar la logística en las misiones de convoy. Por ejemplo, un par de soldados puede operar un convoy que normalmente requiere dos soldados en cada vehículo, liberando a los soldados adicionales para realizar otras misiones, como proporcionar seguridad para el convoy.  La nueva generación de vehículos de combate está destinada a reemplazar a Bradley a partir de 2026 y está diseñada para operar mejor en entornos futuros que permitirían a los soldados maniobrar a una posición ventajosa y participar en combate cuerpo a cuerpo y entregar una letalidad decisiva durante la ejecución de combinados. maniobra de brazos.

Fuente: https://defence-blog.com

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