Navantia está realizando un esfuerzo importante, en el que se están viendo involucrados unos tres mil efectivos entre
personal propio y contratado trabajando para la Factoría de Cartagena, para abordar los intensos y exigentes
trabajos que requiere la fabricación de los submarinos del
tipo S-80 Plus para la Armada española.
A la vez que, con la nave ya a flote, siguen los trabajos en el S-81 Isaac Peral para que pueda llegar a la Armada en
el primer trimestre de 2023 tras un intenso 2022 en el que será sometido a todo tipo de pruebas y navegaciones, se siguen las tareas propias de la
fabricación de los tres restantes.
En fechas recientes
hemos estado visitando el avance en las mismas e, in situ, observar que los cinco módulos que conforman el
submarino S-82 Narciso Monturiol son objeto de todo tipo de trabajos para adecuarlos y finalizar todo lo
necesario antes de su ensamblaje final como conjunto. Esas secciones, que conforman el casco resistente de la
nave, incluyen la proel que acoge al sistema de estiba y lanzamiento de las armas que conforma el potencial
ofensivo de estos navíos, una segunda donde se ubica el Centro de Información y Combate y encontramos en su
parte superior a la vela con los distintos periscopios y sensores y una tercera en la que se situará el módulo AIP
que permite al sumergible tránsitos de hasta tres semanas sin tomar oxígeno del exterior.
Entre las dos anteriores se encuentra el cofferdam realizado con acero de la máxima resistencia -haría de
barrera frente a una hipotética entrada de agua del exterior- y con un espacio con forma que recuerda a una
botella que incluye la exclusa que facilitaría la entrada y salida de buceadores o la evacuación en caso necesario.
Una cuarta sección incluye a la propulsión y la quinta es el cono de popa. Como hemos podido observar, el ritmo de trabajo, con mecánicos cortando chapa, realizando soldaduras.
¿ Tenéis alguna idea de que se trata ese semidepósito adosado sobre el casco de presión que aparece en la fotografía de cabecera ?
ResponderEliminar