El astillero de San Fernando se prepara para la entrega de la tercera corbeta saudí.

La construcción de las corbetas saudíes en el astillero de San Fernando sigue su curso y cumple con los plazos de entrega marcados en el calendario. Así, la tercera unidad está prevista que se entregue el mes que viene, concretamente el 5 de diciembre, aunque la fecha aún puede variar en función de las pruebas de mar del buque. Esta corbeta llevará el nombre de 'Hail', en honor a una de las provincias más fértiles del país. Está corbeta se boto el 28 de marzo de 2021 y, desde entonces, ha permanecido en el muelle con el desarrollo de su obra interior y de plataforma. 

 

El astillero isleño entregó el pasado 31 de marzo la primera corbeta, bautizada con el nombre de 'Al-Jubail', y siguió con el ritual el 26 de julio, con la entrega del segundo barco 'Al-Diriyah'. La tercera entrega marca un nuevo rumbo en el desarrollo del proyecto y, especialmente, para Navantia, que empieza a agotar la carga de trabajo. Desde hace meses, la dirección de la compañía española y representantes de la defensa saudí estudian la posibilidad de ampliar el contrato con nuevos encargos navales. De momento, la puerta está abierta aunque no se ha materializado ningún tipo de acuerdo. Las corbetas que ha diseñado Navantia para la Marina saudí pertenecen al modelo Avante 2200 y están preparadas para desarrollar guerra anti-aérea, guerra anti-superficie, guerra anti-submarina, guerra electrónica, guerra asimétrica, guerra de minas y control aéreo. 

 

También están capacitadas para misiones de búsqueda y rescate, misiones anti-piratería, control de aguas territoriales y seguridad marítima. Navantia ha destacado que los buques incluyen una serie de innovadores sistemas tecnológicos, entre los que se encuentran el sistema de comunicaciones integradas Hermesys, la dirección de tiro Dorna, el Sistema Integrado de Control de Plataforma y el puente integrado Minerva. Las corbetas Avante 2200, adaptadas a los requerimientos de Arabia, ofrecen prestaciones avanzadas, un excelente comportamiento en el mar, alta capacidad de supervivencia y capacidad de operación a temperaturas extremas como en la zona del Golfo. 

 

Satisfacción

El Gobierno de Riad ha mostrado su satisfacción con el trabajo de Navantia y con el resultado de los dos buques que ya se encuentran operativos en la flota saudí. El objetivo ahora es estrechar aún más los lazos de colaboración con Arabia y lograr nueva carga de trabajo para la Bahía de Cádiz. España y Arabia trabajan en la posibilidad de firmar un nuevo contrato naval que permita a los astilleros gaditanos continuar con el ciclo que inició en 2018 con la firma del contrato de construcción de las cinco corbetas. 

El objetivo es que Navantia construya para la Marina Saudí dos buques anfibios y las lanchas de desembarco y no se descarta también la posibilidad de fragatas. El Gobierno de Riad está muy satisfecho no solo por el cumplimiento de los plazos de entrega sino también por el tema de gestión del proyecto naval de las corbetas. El contrato para la construcción de cinco corbetas entró en vigor en noviembre de 2018 y, desde que se procedió a la botadura de la primera unidad (en julio de 2020), Navantia ha botado las cinco unidades con una cadencia de cuatro meses entre cada una de ellas, lo que supone todo un récord. La irrupción de la pandemia no alteró de manera drástica los planes de producción, aunque hubo que reajustar algunas fases para mantener las fechas de entrega . 

 

Nueva oficina

La empresa pública española abrió en octubre de 2021 una oficina en Riad para coordinar acciones sobre el contrato de las corbetas, como el apoyo a su ciclo de vida, y también para desarrollar proyectos de futuro. La oficina se encuentra en el centro de negocios Riyadh Business Front de la capital saudí. Cabe recordar que los tripulantes de estas corbetas, unos 500 en su totalidad, completan su proceso de formación y capacitación en el Navantia Training Centre (NTC) en San Fernando. 

 

Además del contrato de corbetas, Navantia acordó con SAMI (Saudi Arabian Military Industries) la creación de una joint venture en Arabia Saudí. Esta alianza ha beneficiado a Navantia y ha permitido impulsar los programas de defensa en el país, reforzando su economía. El contrato ha significado una carga de trabajo global de alrededor de siete millones de horas, 6.000 empleos durante cinco años. De estos, más de 1.100 son empleados directos, más de 1.800 empleados de industria colaboradora (participan más de un centenar de empresas) y más de 3.000 empleados indirectos generados por otros suministradores. El programa incluye también el Apoyo al Ciclo de Vida durante cinco años, desde la entrega del primer buque, con opción a otros cinco años adicionales. 

 

 

Además, recoge el suministro de varios servicios, tales como apoyo logístico integrado, adiestramiento operacional y de mantenimiento, suministro de Centros de Formación y Adiestramiento para el Sistema de Combate y Sistema de Control de Plataforma de los buques, el Apoyo al Ciclo de Vida y los sistemas para el mantenimiento de los buques en la Base Naval de Jeddah. Navantia no quiere perder la oportunidad de seguir trabajando para Arabia. La empresa española ha avanzado con los técnicos saudíes un modelo especial de buque anfibio, es decir, ha diseñado un traje a medida de las necesidades del cliente. Para ello, ha puesto sobre la mesa los buques anfibios 'Galicia' y 'Castilla', además del porta-aeronaves 'Juan Carlos I', mientras que en el plano de las fragatas, la compañía, según ha podido saber LA VOZ, también ha realizado una faena de confección con la presentación del modelo Alpha 400, que es una fusión tecnológica de las F100 y F110 españolas, amén de los destructores AWD de Australia, y las F310 noruegas. 

 

El Gobierno de Riad está interesado en la compra de dos buques anfibios para el transporte de tropas y con capacidad para el despliegue de blindados, helicópteros y lanchas de desembarco. La nueva iniciativa de la Marina saudí se dio a conocer de manera muy tímida en la primavera de 2019, pero lo que fue un deseo se ha convertido ahora en una realidad y todo apunta a que Navantia, sin desvelar ningún tipo de información, trabaja en un acuerdo de futuro con este país. El 'Galicia' y 'Castilla', ambos con base en Rota, y construidos entre 1995 y 1998 en el astillero de Ferrol por la antigua Izar, son buques anfibios con hangar para cuatro helicópteros y la posibilidad de transportar hasta 600 efectivos, además de carros de combate. Cuentan también con un hospital en su interior.  

Fuente: https://www.lavozdigital.es/